Crítica de Solaris (2002) - Steven Soderbergh (5)
3:11 by , under Ciencia Ficción, Drama, Misterio, Steven Soderbergh
Dirigida: Steven Soderbergh.
Guión: Steven Soderbergh (basado en la novela de Stanislav Lem).
Nota: 6,6
Guión: Steven Soderbergh (basado en la novela de Stanislav Lem).
Nota: 6,6
Sinopsis
En un mundo indeterminadamente futuro, una estación espacial estudia un fenómeno denominado Solaris. El científico al cargo de la misión contacta con un amigo suyo en la tierra, el doctor Chris Kelvin, para pedirle que viaje hasta allí para tratar de entender algo que está sucediendo y sobre lo que no le especifica nada.
Crítica (!)
En un mundo indeterminadamente futuro, una estación espacial estudia un fenómeno denominado Solaris. El científico al cargo de la misión contacta con un amigo suyo en la tierra, el doctor Chris Kelvin, para pedirle que viaje hasta allí para tratar de entender algo que está sucediendo y sobre lo que no le especifica nada.
Crítica (!)
Muy interesante adaptación de la novela del mismo nombre escrita por Stanislaw Lem, la cual no he tenido ocasión de leer. Justo 30 años antes ya se filmó otra adaptación en esta ocasión por Andrei Tarkovsky, la cual trataré de ver si es posible viniendo de tan ilustre director.
La peli empieza con una atmósfera sugerente. Uno de los primeros planos es muy interesante, la cámara bajando y ese ruido de fondo que va aumentando mientras los pacientes hablan. El plano está centrado en la figura del doctor, que se halla inmóvil y como si escuchara, pero realmente transmite un vacío de atención hacia sus pacientes, como si se hallara perdido en su propio mundo ajeno a todas esas explicaciones. Al mismo tiempo basta con media pincelada para hacernos comprender como se gana la vida nuestro protagonista, y todo ello en un plano bello, sencillo y de escasa duración. ¡Eso es cine!
Después se suceden imágenes distraídas, cortas y rápidas para mostrar un poco de la rutina en la que vive inmerso. En el tren, entrando en casa, haciendo la comida; en seguida podemos ver que todos los días de la vida de este hombre son igualmente solitarios y monótonos, y captamos también su pesadumbre, su tristeza, esa que se medio se intuye en la escena en la que el tipo recién despierto está sentado pensativo sobre esa cama en la que sólo duerme él; una escena cuidadosamente adornada por esa voz de mujer que vaga por su pensamiento como ecos de un hipotético pasado.
Como era de esperar algo rompe el ritmo y desgraciadamente de una manera particularmente típica. El video del amigo diciéndole que pasa algo grave, y que tiene que ir a un lugar sin saber porqué. Recurrido uso de la fórmula “nos escuchan” para justificar que no puede decirle nada. En cualquier caso y desde mi punto de vista no hay nada que haga pensar que sea necesariamente malo que alguien (dios sabrá quien) pueda escucharlo; pero por otro lado es creíble ese punto de paranoia realista si tras ver el film nos ponemos en lugar de este hombre enfrentándose a algo tan excéntrico. Tras esto cambiamos la escena sin excesiva demora para que el espectador no se distraiga por estos paisajes prosaicos y funcionales.
Siguiendo con el ritmo pausado del film, el director se recrea en un bello conjunto de imágenes acompañadas por una bonita melodía para describirnos el tránsito de Kelvin hasta su destino en la estación espacial, lo cual hace aumentar inteligentemente la intriga a la que fuimos seducidos momentos antes sin demasiado arte. Los decorados de la nave nos sitúan en un inequívoco momento futuro pero con un acabado digno de absoluta credibilidad.
Le diría lo que está pasando pero no sé si eso le aclararía lo que está pasando; interesante frase un tanto estereotipada pero que no desencanta en el conjunto y cumple el cometido para el que fue concebida. Una vez visto el film o comprendido lo que sucede, cobra todo su sentido y tridimensionalidad.
La película se conduce por los mismos patrones de tranquilidad una vez nuestro protagonista deambula por la estación, da cuenta de las muertes, entra en contacto con los personajes residentes y trata de esclarecer lo sucedido en una escena con la doctora Gordon en la que le pregunta directamente qué ocurre. La pregunta es del todo consecuente y de necesario rigor, pero no tanto así la respuesta que o no se sucede o de hacerlo se produce fuera del rango de captación del micro y del objetivo de la cámara... Obviamente el director no se va a permitir el lujo de desvelarlo todo de boca de un personaje si puede hacerlo de manera visual; pero podrían haberse evitado la pregunta y el corte antinatural de formas menos descaradas. Pequeño desliz que se trata de disimular rápidamente haciendo que nuestro hombre acabe incluso dispuesto a dormir en aquel, en apariencia, homenaje a la incomodidad en forma de cama de space ópera. No hablemos de la almohada para la cabeza sin apoyo cervical (o viceversa) que duele con sólo mirarla.
Sensacional la manera en la que se narran los acontecimientos de redescubrimiento de su mujer mientras nos ofrecen un retazo de su pasado. Llegados al Punto de inflexión del film el director nos mantiene en la butaca con escenas curiosas y bien interpretadas en cuanto al asombro del protagonista y su ex-difunta esposa.
A partir de aquí la película se vuelve bastante psicológica, y como quiera que dijera un día un gran amigo: los sentimientos son finitos; pero no la manera de representarlos, contesté yo; el film se debate entre una muestra más que interesante de este extraño acontecimiento, sazonado con unos diálogos creíbles e interesantes en los que se mezclan estos sentimientos en un tapiz sin igual en cuanto a originalidad, con el peso existencial y filosófico que todo lo impregna de repente.
Todo se sucede con tranquilidad hasta la escena en la que vemos a Kelvin postrado en la cama sudoroso. Momentos antes la voz de Rea nos pone en situación a través de una advertencia a su marido de que puede caer enfermo por no dormir. Extrañamente después le vemos tendido en la cama y puede que febril, sin que acabe de comprender muy exactamente por qué, y sin poder evitar tener el pensamiento de que era la única forma de separar al personaje de la puerta de su camarote. Una vez más tengo la impresión de que el director añade un detalle prescindible del que no sabe salir con la soltura esperada creando uno de esos momentos extraños. Deus ex machina.
No acabo de entender lo del personaje de Snow. Creo que es un añadido estéril que se descuelga de la trama sin contarnos nada realmente interesante y que no compensa esa ligera sensación “thrilera” que transmite cuando descubren que él también es un “hijo de Solaris”. Además algo no encaja, pues el tipo dice haberse matado a sí mismo mientras que al inicio de toda la trama decía que era su hermano quien le visitaba. O bien se quiere mucho a sí mismo y “se hace aparecer”, o cuando dijo su hermano quizá quería decir su hermano gemelo, lo cual tendría una cierta lógica y serviría a la perfección para explicar ambas respuestas, pero en ese caso sería harto curioso que su gemelo hubiera no sólo cursado lo mismos estudios si no que conociera cosas propias al proyecto Solaris y todo ese contexto. Entonces tomamos como más probable el echo de que sea él mismo, lo cual no deja de parecerme extraño y totalmente accesorio, ya que significa dedicarle demasiada atención y neuronas a algo que se aleja del tronco argumental y que ni si quiera queda claro a los ojos del espectador.
El desenlace es interesante, quizá un tanto inesperado pero con cierta belleza después de todo. Me gusta la narración en off que viene a explicar pausadamente que él también es un
Aunque el guión me parece correcto y tiene algunos buenos momentos, me quedo destaco una frase que me llegó de una manera especial: Ojalá pudiéramos vivir dentro de ese sentimiento para siempre. Tal vez halla un lugar donde eso sea posible pero sé que no está en la tierra ni tampoco en esta nave. Me gusta por lo que transmite de manera sentimental, pero al mismo tiempo surge una cuestión interesante: ¿Finalmente están en la tierra o en una especie de recreación de toda ella dentro de aquel extraño cuerpo celeste totalmente desconocido?
Lo mejor (!)
- La banda sonora es muy atmosférica y juega un papel fundamental en trasmitir cada una de las emociones del momento, pese a no estar muy presente y resultar algo monótona.
- El ritmo está muy bien determinado, en el punto justo para no aburrirte viendo una historia en la que no suceden demasiadas cosas.
- Muy interesante el detalle de realista futilidad en el que queda el intento de la doctora Gordon por acabar con estos seres no humanos. Gracias a eso podemos ver parte de la personalidad y la determinación con la que se impone llevar a cabo esa tarea y casi podemos presentir lo duro que debió ser para ella sobreponerse a utilizar aquel aparato con su visitante. Un detalle interesante si tenemos en cuenta que al final poco importaban tales esfuerzos. Creo que cuando un personaje secundario realiza algo que no ayuda en el desarrollo de la trama y dedica esfuerzo en conseguirlo, nos queda una visión de los diferentes anhelos o pretensiones de lo que podría ser una persona de la vida real. Lo que es en definitiva transmisión de realidad.
Lo peor (!)
- Detalles menores que fuerzan el desarrollo de la trama y que podían haber sido sustituidos o matizados de una manera menos brusca: como lo del video, la esquiva cinematográfica a la pregunta formulada a la doctora Gordon, o el estado febril que propicia la huida de su mujer.
- Se echa de menos algo más de explicación sobre Solaris, pues las pinceladas son muy vagas en el avance de la trama haciendo comprender después de visto el film algunas de sus naturalezas; pero queda un extraño vacío por el cual el espectador se da cuenta a media película (más o menos al mismo tiempo que Rea) de que hay algo fuera que no se sabe lo que es y de lo que nadie ha hablado, y que obviamente es el foco de todo lo que sucede. Algún apunte anterior o quizá en ese instante hubiera estado bien: dónde está, cómo se descubrió, por qué están allí, cuál es su misión, qué saben de Solaris; pero a través de unas pinceladas diseminadas por el metraje para dar poco a poco al espectador la noción de algo que existe pero que se desconoce por completo y que como ya he dicho, se trata del foco de toda la trama. La dosificación de la información puede ser muy interesante para intrigar, pero si la suprimes toda es imposible preguntarse por algo que no sabes que existe. Creo que el miedo a mostrarlo en exceso y distraer al espectador de lo que pretendía transmitir, ha hecho que se prefiera suprimir más referencias de la cuenta.
Conclusión y recomendación
Película harto interesante de recomendada visualización. No es una obra maestra pero goza de gran cantidad de detalles de buen cine que pueden ser disfrutados por un público relativamente selecto. No creo que deje a nadie indiferente.
Para un mejor análisis, sin duda abría que ver la primera adaptación para ver en que medida se han apoyado en ella o directamente en la novela.
5 Reply to "Crítica de Solaris (2002) - Steven Soderbergh"
Lobo de piedra on 16 de julio de 2010, 14:44
Me encanto esta película. Me sorprendió mucho porque yo tampoco habia leído la novela ni visto la versión anterior. Le podías haber puesto algo mas de nota (que tal un 8,5)
Francisco Bravo (Bulldozzzer) on 8 de agosto de 2010, 5:22
Muy probablemente tengas razón y merezca más nota. Cuando la vuelva a ver quizá lo haga, pero me da como miedo excederme XD
Anónimo on 10 de mayo de 2013, 23:20
Pues hay que leer la novela, asi descubriras lo maravillosa que es y descubriras tambien que la pelicula se queda a medias acerca del tema esencial de la historia, el cual ni siquiera toca y se queda solo con la parte romantica, razon por la cual la peli fue muy poco valorada ya que la novela va mucho mas alla de solo de contar una historia, te hace reflexionar acerca de la existencia de otro tipo de seres inteligentes y si realmente la raza humana es algo en este basto universo.
Anónimo on 6 de marzo de 2017, 14:56
Entonces tomamos como más probable el Hecho de que sea él mismo
Cuidado con la h. Buena crítica.
Andrés on 20 de septiembre de 2018, 19:17
Very good 👌
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